sábado, 23 de julio de 2011

Machete: Diez razones (…y una justificación) sobre una mala película

 
Por Amílcar Barca
 
1) Para hacer una película buena sobre un género “malo” (serie B) hay que saber hacer lo malo bien para que sea una buena película.

2) Imitar al maestro Tarantino requiere imbuirse de él y no copiarlo. En esta película se nota que no es el guest director ni lo supervisa como en Sin City o Grindhouse.

3) Para que un héroe feo ( antihéroe) y protagonista sea sexy Machete (Dany Trejo) y anticreíble, hay que utilizar el humor ( Santiago Segura en la serie Torrente) la indiferencia  (Charles Brownson en sus westerns) o la inteligencia adolescente( Woody Allen en Manhattan o Annie Hall).

4) Los éxitos de la serie B se basan en la incomprensión y/o exageración de las respuestas delante de las situaciones difíciles, o incluso el abuso de ellas como espectáculo, pero cuando los entornos absurdos se intuyen como respuesta aparece el “dejà vue” y deja de tener su efecto de resolución imaginativa.

5) La escenas de masas de los figurantes no pueden rodarse arbitrariamente tienen que cumplir su función –en este caso de circo- y parecen sonsacadas de una audición antes de rodar.

6) Si hay dos chicas que pelean por el héroe ¿Por qué sólo una se queda con él . (Yo como mínimo me imaginaba un trío para romper esquemas, y lo digo en serio). Y si se queda con él ¿por qué no muestra la atracción sexual desmesurada que se merece el “héroe”?. El beso final de la película pretende ser la máxima acumulación de lujuria por las situaciones superadas ( y ya incluyo con ello el término irrisorio o increíble que se merece imitar un final de serie B) y en cambio se convierte en un beso de nieta (Jessica Alba) al abuelo de Heidy encima de una Harley Davinson.

7) Hay una problema de montaje que atasca la narrativa de muchas escenas. No las deja descansar ni desarrollarse por sí mismas y rompen el microrrelato emotivo o erótico que hay en ellas. Por ejemplo cuando él está con April (Lindsay Lohan, por cierto haciendo de sí misma) y la mujer de Booth (un excelente Jeff Fahey) en la piscina.

8) Un guión está para reforzar al personaje y ascenderlo en su recorrido por el film. En este guión hieren tantas veces a Machete con “machetes” y balas que ya siempre intuyes el final. Hay demasiados arrestos y trampas donde “ya lo vamos a matar definitivamente”, y tantas convalecencias que cansa ver tantas “recuperaciones” milagrosas con la misma emoción de enfermo en su rostro. Es decir me apuntaría a que hubieran 15 veces más intentos de asesinato antes que soportar una sola convalecencia más con la cara permanente de aquejado en todas las escenas donde desarrolla la acción.

9) Dirigir a un actor que antes fue un excelente secundario (Danny Trejo) no es lo mismo que dirigirlo como actor principal . Danny Trejo es exageradamente plano en lo emotivo y Rodríguez no ha sabido aprovechar las virtudes de este rostro resquebrajado y amerindio para crear un personaje “frío”. Y al revés dirigir a secundarios que han sido estrellas (Don Johnson, Steven Segal o el mismísimo Robert de Niro) requiere respeto y conocimiento en su inclusión, aunque jueguen el papel de “malos” de comic. Para mí es un error envolver a “malos duros” en “malos bajo la payasada” para soltar la carcajada es de nieta a abuelo. Las hipérboles cinematográficas bien hechas te hacen reír; las tonterías sólo sonreír, que es el peor insulto para una película con estas pretensiones.

10) Los westerns modernos chicano-asiáticos con disputas entre catanas o machetes guajiros, brillo metálico de armas automáticas y hombres volando por el aire con sangre por litros en el cuerpo ya han cumplido su papel como género. Justificación: Gracias Robert Rodríguez por El Mariachi, Desperado, o Sin City…los que amamos el cine no te olvidamos y creemos en ti. Pero: “No todo vale…pendejo”. (entiéndase con cariño, gracias).

No hay comentarios: